miércoles, 30 de noviembre de 2011

Sobre la infancia de un infante

Encontrabase en el fondo de una cueva
dentro del bosque circundante
allí se escondía el infante
con aquella víctima nueva.

Llamaron a la puerta y voluntariamente salió
nada de lo que aconteció se olió
estaba abismado en sus cavilaciones
ajenos de sus malas acciones.

¿Quién dice que la religión ayuda?
¿Acaso no es perjudicial abusar de ella?
En pequeñas dosis puede aliviar las penas
pero en mayores, tu vida dejará de ser tuya.

El infante vendió su alma sin maldad
agarrandose a la comodidad de creer
no se dio cuenta de cuando dejó de ser él
nunca aceptó la verdad, no siendo su culpa en realidad.